Reseña "Todas las hadas del reino" de Laura Gallego

Título: Todas las hadas del reino
Autora: Laura Gallego
Editorial: Montena
Páginas: 480
Precio: 15,95 euros
Género: Fantasía
ISBN: 9788490433713

SINOPSIS
Un nuevo cuento de hadas protagonizado por un personaje tradicionalmente secundario; el hada madrina. Una novela ambientada en un mundo de fantasía, que evoca los cuentos clásicos de siempre, pero al mismo tiempo plantea una historia diferente repleta de magia, aventuras e intrigas. Camelia es un hada que lleva trecientos años ayudando con gran eficacia a jóvenes doncellas y aspirantes a héroes para que alcancen sus propios finales felices. Su magia y su ingenio nunca le han fallado, pero todo empieza a complicarse cuando le encomiendan a Simón, un mozo de cuadra que necesita su ayuda desesperadamente. Camelia ha solucionado casos más difíciles; pero, por algún motivo, con Simón las cosas comienzan a torcerse de forma inexplicable.

OPINIÓN
Laura Gallego es una de mis autoras favoritas, como hice saber al comienzo del blog hace ya unos dos años, pero poco a poco, y conforme voy creciendo, sus obras me van dejando de llegar. Sé que en la mayoría de casos no dejan de ser una apuesta segura, una apuesta segura porque es muy probable que la disfrute, que me haga pasar un buen rato, que no me aburra. Pero echo de menos esa Laura que jugaba conmigo, que le daba una profundidad a sus personajes que dejaba pasmado, que te hacia devorar páginas y páginas y te dejaba el corazón machacado al final, porque si Laura tiene un punto fuerte, ese es dar unos finales emotivos y épicos a más no poder (Crónicas de la Torre, Memorias de Idhún, Dos velas para el diablo... ¿Algo más?). Y cada día parece que se pierde más esa Laura, o es que en comparación a lo que ya he leído de ella jamás nada me parecerá suficiente -echarle las culpas a las expectativas, viejo truco-, pero a mí Todas las hadas del reino no me ha movido el corazón. Me ha gustado, me ha divertido, no ha supuesto ningún esfuerzo y no cambiaría la lectura por otra, pero mi patata siguió tan intacta después de la lectura como al comienzo.
En este libro nos encontramos un cuento de hadas poco convencional, más adulto, más innovador, gracias a que está protagonizado por un hada madrina. Una figura de la fantasía que suele estar ahí, pero que se pasa por alto, cuando sin ella no habría trama ninguna. Eso sí, no pierden el toque clásico la historia y la narración, y es que todos sabemos que a esta autora le va lo épico inspirado en los grandes autores de fantasía de todos los tiempos.
A ver, comencemos con la protagonista, Camelia, hada madrina de una cantidad de niños considerable. Es una chica señora hada trabajadora que se desvive por ellos. De cabeza fría, corazón grande y vida tranquila dentro de lo que cabe, un encargo que ni siquiera le toca a ella cambia el curso de su vida de forma bestial. A veces hasta las hadas madrinas tienen complicaciones. El personaje en sí me ha gustado, aunque me ha parecido un pelín borde en ocasiones. Lo que sí es cierto es que la he preferido en la que yo diría que es la segunda parte del libro, aunque no os voy a adelantar nada, porque resulta sorprendente. ¿Me hubiera gustado que se hubiera presentado al hada madrina de otra forma? Pues seguramente sí. A ver, no me ha desagradado, pero yo que sé, esperaba otra cosa, más profundidad. Al final no se ha salido del típico hada madrina que mueve la varita y concede deseos, poco más. Esperaba un lavado de cara íntegro al personaje que se nos presenta en la Cenicienta y, en ese aspecto, no me ha parecido para tanto. Eso sí, la parte en la que se conocen los diferentes ahijados y sus problemas ha sido interesante.
Sobre la narración, es en tercera persona. En cierta manera me hubiese gustado que todo lo hubiera contado la protagonista, para conocerla mejor. Pero bueno, la verdad es que la pluma de esta autora me gusta bastante debido a que sin ser exageradamente descriptiva, te define las cosas importantes y te permite meterte en el escenario con facilidad. No se te hace pesada, al contrario, le da ligereza a la historia y la hace más entretenida.
Y, bueno, la trama. Lo único de lo que tengo queja es que me he quedado sin respuestas sobre algunas cosas. Por lo demás, todo bien. Está perfectamente hilado todo y no deja espacio para el aburrimiento. Camelia siempre tiene algo de lo que ocuparse y contarnos y, además, no para de haber acción, no deja lugar para el aburrimiento.
Y, sobre la edición... bueno, la portada es una cucada. Me gustan los tonos de colores, pero lo mejor es el efecto metalizado que tiene la enredadera dorada y la tipografía del título. Es tapa blanda con solapas y el interior es bastante simple. Buen trabajo hecho por Montena.

Total, que me ha gustado, pero no me ha encantado. Es un libro que, de verdad, no me arrepentiré de haber leído y disfruté bastante, fue un entretenimiento y el final me dejó satisfecho. Pero no me ha dejado marca. No ha pasado demasiado desde que lo leí y ya se me han olvidado muchas cosas y eso solo quiere decir que le ha faltado chispa a la trama o a los personajes, o a los dos. Pero os animo a leerlo, por lo menos por dejaros el buen sabor de boca que supone leer algo de fantasía diferente, con una protagonista que se sale de lo típico.

Lo mejor: El cambio que sufre Camelia sobre la mitad de la historia. No sé, me ha parecido un giro en la trama entretenido.
Lo peor: Me han faltado algunas respuestas.

PUNTUACIÓN
7/10