Cuando una vez más Annabel decide huir en vez de afrontar los problemas, su vida da un cambio radical. Aislada en el colegio y en casa, solo encuentra apoyo en Owen, un compañero de instituto, que tiene por norma decir siempre la verdad, sin importarle las consecuencias. Annabel convierte la música en su vía de escape y trata de encontrar el valorde afrontar lo que de verdad ocurrió la noche en la que Sophie dejo de ser su mejor amiga.Que enorme decepción con este libro:/ Me han dicho que Sarah Dessem es una escritora para amar u odiar, y yo, aunque no llegué al extremo de odiar esta novela, la verdad es que la amé bien poquito. Después de casi un año en mi wishlist por fín me lo compré y cuando llegué a casa con toda la ilusión del mundo me llevé la que posiblemente sea la decepción del verano (que por cierto y desgraciadamente, acaba de terminar). La narración está en primera persona desde el punto de vista de la protagonista, y reside aquí el gran problema: LA PROTAGONISTA. Ofú, que pedante¬.¬ A pesar de estar contando la historia la mayor parte del tiempo la narra de forma fría, ausente, con poca demostración de sentimientos, a parte de la cobardía. Eso sí, el libro está llenísimo de "Oh, ¿que hubiera pasado si no hubiera hecho eso?" y de otros tantos "Debería haberlo evitado, pero no lo hice". Sin embargo hasta el final (finalísimo, estamos hablando de las últimas cinco páginas) no muestra signos de cambio.
En resumen: la historia la crean los personajes secundarios, porque la protagonista lo único que hace es llorar como una niña tonta y compadecerse de si misma, sin motivación ninguna para arreglar sus problemas.
Owen es encantador, eso sí. Raro (no nos engañemos) pero encantador.
Sophie es una bruja. (con perdón de la expresión)
Como se tratan lo problemas alimenticios de la hermana de Annabel no me gustó demasiado. La autora la ha escrito como una historia comodín, de la cual de vez en cuando salen matices, para que nos hagamos una idea de lo que ocurre. Pero en verdad nunca lo sabemos porque Annabel es la que nos cuenta como le va y para mi gusto lo hace con una insensibilidad muy grande, como si fuera imposible traspasar el duro cristal que rodea el corazón de su bella hermana Whitney. Aunque no es que lo intente. Por lo que llevo escrito parece que me halla parecido el peor libro del mundo, pero no, aunque no soy un gran fan, unos cuantos puntazos tiene, como reflexiones así:
La música es una constante absoluta. Por eso tenemos una conexión tan visceral con ella, ¿sabes? Porque una canción pueda llevarte instantáneamente a un mmento o lugar, o incluso a una persona. No importa si todo lo demás ha cambiado en ti o en el mundo, esa canción sigue siendo la misma, justo como en aquel momento. Lo que es alucinante,si te paras a pensarlo.
En las confrontaciones, tienes que ser lo más específica posible, para evitar malos entendidosADORO COMO SE TRATA EL TEMA DE LA MÚSICA EN ESTE LIBRO. Si le hubieran dado aun más protagonismo, es probable que esos pequeños (y grandes) defectos del argumento y la narración desaparecieran o, al menos, no se hicieran tanto de notar. Frases para enmarcar, con muchas florituras, pero simplemente bellas. Y sin duda una de las mejores descripciones de lo que es la música que podéis encontrar en el mundo, es como si hubieran extraido las palabras de mi cabeza y lo hubieran puesto en la historia (de una manera mejor explicada de lo que yo haría) de una forma natural y magistral.
Lo mejor: ¿No está claro? el protagonismo que coge la música en esta historia.
Lo peor: La protagonista y el tiempo que dedica (la mitad de la historia) a remover su pasado y recordarlo amargamente mientras se compadece a sí misma, en vez de arreglar su propio presente que esta hecho un caos.
Puntuación: 6,5/10
No hay comentarios:
Publicar un comentario